El ritmo de posts de este año, está siendo un poco diferente, parece que cueste arrancar y no es más que una sensación. En realidad está uno muy activo y con energías renovadas. Y para retomar el hilo del blog, qué mejor que retomar uno de los temas estrella, no sólo del blog, si no que de la sanidad. Hablemos pues de nuevo de las Apps de salud. Y hoy lo hacemos con una pregunta, ¿caducan las Apps de Salud?
Esta es una pregunta que realmente alguna vez me había planteado, pero realmente tras la experiencia y el trabajo que estoy llevando a cabo con el equipo de @2RescApp en el desarrollo de la App, (App de Salud), me he dado cuenta de la magnitud y la importancia que tiene, o puede tener el tema de la caducidad de una App.
Para empezar, el desarrollo de una App es algo más complejo que hacer realidad una idea, aunque ese puede ser el punto de partida. Podríamos llamarlo o catalogarlo como proceso. Ya que se trata de un desarrollo continuo, en el que se prueban y se evalúan diferentes versiones de la misma App, en el que la primera idea, que conforma la primera versión, sufrirá cambios hasta llegar a cumplir los objetivos o las expectativas que se tienen o desean.
Si nos centramos en el ámbito de la Salud, se debería sumar un plus de responsabilidad por parte de los creadores de las Apps, ya que el producto final estará dirigido a las personas queriendo afectar o incidir de manera positiva a su salud. En primer lugar el desarrollo debería estar avalado por profesionales de la salud. Algo que le daría a la supuesta App un plus de confianza, rigor y responsabilidad con el usuario.
Aportar la mejor evidencia en el tema que se debe tratar, debe ser una de las premisas del equipo de profesionales sanitarios que esté detrás de la misma. Pero además deber ser trabajo de todos (del equipo multidisciplinar) el ver la App como un proyecto dinámico, que ha de ir mejorando, y además actualizando periódicamente, aunque sólo fuera para decirnos que ha sido revisada y actualizada.
¿Cómo saber si una App que utilizo está Actualizada?
En las diferentes tiendas de Descarga de Apps Existen varios apartados que nos pueden ayudar y orientar en ello, pero deberemos estar muy atentos.
La información del Desarrollador:
En este apartado, nos encontramos con la información detallada de la app que proporciona el desarrollador. En ella deberíamos poder ver quién está detrás de la App y cuáles son los objetivos que se marcan y el objeto de esta aplicación. Es muy importante la tener en cuenta este apartado y leerlo antes de la descarga de la app. Nos puede orientar en su confiabilidad y utilidad.
La Versión:
Se trata de un número que nos indica la actualización de la app. Una app recién salida del horno será una versión “1.0” y según las modificaciones que vaya teniendo ésta, y los sustanciales que sean, nos encontraremos ante versiones con números superiores. Por ejemplo 1.2 o 1.4, o cambiando el primer dígito si la versión sufre cambios importantes, 2.0, 3.2 y así sucesivamente.
La Fecha de Actualización:
Cada actualización dispone de una fecha de lanzamiento. Posiblemente este sea el indicador de mejor de que la app está actualizada y de que hay un equipo detrás que está revisando continuamente la misma. Y aquí surge la pregunta, ¿Cuándo considero que está caducada? Realmente no hay nada o hay poca cosa escrita sobre esto. En mi modesta opinión creo que una app que lleva entre 6 meses y un año (estirando mucho) sin ser revisada y actualizada, podría decirse que se ha caducado.
Los sistemas operativos de los smartphones, suelen actualizarse periódicamente, o continuamente. Algo que sin duda afecta a las apps que están instaladas, ya que en muchos casos deben de ir actualizándose, para adaptarse. El que estas App de salud, no sigan un ritmo, no idéntico, pero si similar, puede ser un síntoma de caducidad. Y esto no es solo por la propia “maquina” o el Sistema operativo, si no que en muchos casos, cuando nos referimos a temas de salud puede ir variando incluso la evidencia científica en la que se sustente, y por ello se debería revisar también. Aunque sólo fuera para decir que no ha cambiado esta evidencia.
Las Novedades:
En el apartado de novedades el autor introduce aquellos cambios que ha realizado en la app. Explicando aquello que se ha revisado, añadido, mejorado y/o suprimido. En muchas ocasiones nos encontramos en estas apps mensajes muy escuetos en estos apartados: “se han corregido fallos menores (por ejemplo)”
Evidentemente que hay cosas y tecnicismos que no deberían interesarnos y un mensaje de este tipo puede ser suficiente. Pero realmente el esfuerzo de lanzar una app y sobre todo si está orientada a la salud, debería de valer la pena el intentar ser más explícito (sobre todo como digo en las apps de salud).
Sea como fuere el Historial de actualizaciones y los diferentes cambios que se incluyen en ellas pueden orientarnos al tipo de trabajo que se está realizando detrás de esa App. Y en caso de llevar años sin cambiar, puede ser síntoma de caducidad.
Y ahora os pregunto…
¿Creéis que vuestras apps de Salud están actualizadas o por el contrario alguna ha caducado?
Espero vuestros comentarios…
Fernando Campaña Castillo, Editor de Nuestraenfermeria.es
Fotografía portada,imagen libre modificada de Pexels
Fernando, gracias por lanzar esta pregunta que nos lleva a reflexionar sobre la actualización de las apps y la importancia del desarrollo continuado de todas las herramientas que tengan que ver con la salud. El aval de los profesionales sanitarios y de los desarrolladores de las apps es fundamental, pero también debemos aprender como usuarios a identificar su ‘caducidad’ para poder obtener de ellas el máximo beneficio. Un saludo.
Gracias por leer el post y participar comentando!
Es necesario q no solo profesionales se impliquen en ello, el usuario tiene su responsabilidad!