
Preocupación
Los cuidados “al final de la vida”, también llamados “cuidados paliativos”, son cuidados que generalmente, y si se aplican de forma excelente, son resultado de un trabajo en equipo realizado por un “equipo multidisciplinar”. Enfermeras y Médicos suelen ser referencia en estos equipos, que además pueden estar formados por Psicólogos, Trabajadores Sociales y Fisioterapeutas, TeCAES o incluso de disponer de otros miembros como son los Auxiliares administrativos.
El que estos equipos estén bien coordinados y su trabajo sea efectivo, constante y útil, en gran medida es culpa de estos dos profesionales sanitarios que se muestran como piedras angulares. No es de extrañar que el papel de la enfermera, por su estrecho contacto con la persona en su cuidado, sea una figura clave en todo el proceso de final de vida. No obstante, el estrecho trabajo realizado no siempre es sencillo, y las percepciones de los diferentes profesionales ante los diferentes casos y situaciones de final de vida pueden dar como resultado opiniones confrontadas ante la estrategia a seguir en los cuidados. Estas situaciones pueden resultar peligrosas, tanto para las personas que reciben los cuidados sobre todo, como para los propios profesionales. Pero además, estas situaciones pueden poner a prueba la integridad del equipo y del trabajo que realiza este, algo que se convierte en una dificultad añadida y que puede provocar un desgaste extra de los profesionales.
Y ¿por qué entro a reflexionar sobre estos temas? El caso es que esta situación de diversidad de opiniones ha sido objeto de ser comentada en la publicación Medscape Nurses, en el artículo de opinión Doctors’, Nurses’ Opinions Differ About End-of-Life Care. En dicho artículo, se extraen conclusiones y se entrevista al autor principal, (Karin Jors, MA), de un estudio Alemán, publicado en la revista “Cancer”, y titulado Dying in cancer centers: Do the circumstances allow for a dignified death?(1) (Morir en centros de cáncer: ¿Las circunstancias permiten una muerte digna?). En el se explica que una de las conclusiones del estudio es que “los médicos tienen una percepción más positiva sobre la atención al final de la vida que de las enfermeras”. Los datos que muestra la encuesta alemana son que mientras que un 72% de los médicos creen que por lo general es posible que los pacientes tengan de una muerte digna, sólo el 52% de las enfermeras compartimos esa opinión.» Según comenta el autor esta diferencia sugeriría que ambos profesionales (médicos y enfermeras), necesitan mejorar su visión común de las necesidades de los pacientes.
Pero ¿Qué se esconde realmente tras estas diferencias de opinión?
Las enfermeras tenemos una visión completa y compleja de la persona, puesto que pasamos mucho tiempo junto ella, llegamos a conocer a los individuos, sobretodo en procesos largos en los que nos involucramos y entramos en sus vidas. Es posible que esto haga que vivamos más de cerca las situaciones y nos impliquemos por empatía un poquito más allá de la línea roja que nunca se debe cruzar. Algo, que seguro que muchos médicos también han hecho, a pesar de que como repito, no se debe hacer. Aunque seamos expertos en el cuidado y el diagnóstico de las necesidades, y que lo que queremos es “CUIDAR” de manera excelente, somos nosotros lo que tenemos una visión más pesimista del tema. ¿Seremos pues pesimistas por naturaleza, o es el entorno paliativo el que hace que sintamos que se puede dar más (aunque realmente no sea así)?
Me gustaría como siempre contar con vuestras reflexiones acerca del tema y vuestros comentarios.
¿Creéis que vivís mejor las situaciones de cuidados al final de la vida que vuestros compañeros de equipo?
¿Formáis parte de un equipo multidisciplinar como enfermeras o médicos?
¿Tenéis una visión común del desenlace final?
¿Creéis que se brinda siempre una “Buena muerte”? ¿O po r el contrario creeis que existen múltiples carencias y mucho camino por recorrer en el cuidado paliativo?
Fernando Campaña Castillo, Editor de Nuestraenfermeria.es
Fotografía portada, Algunos derechos reservados por maitecastillofotografia
(1) Jors, K., Adami, S., Xander, C., Meffert, C., Gaertner, J., Bardenheuer, H., Buchheidt, D., Mayer-Steinacker, R., Viehrig, M., George, W. and Becker, G. (2014), Dying in cancer centers: Do the circumstances allow for a dignified death?. Cancer. doi: 10.1002/cncr.28702
Yo quería dejar como comentario esta entrada que hice hace unos meses en mi blog.
Porque relacionado con este tema está también el «duelo del profesional sanitario», esa asignatura pendiente en las escuelas de enfermería, los colegios profesionales y en las instituciones sanitarias…
http://maite-castillo-fotografia.blogspot.com.es/2014/06/el-beso-final.html
Muchos hemos aprendido el manejo de la muerte y de los paliativos tocando la vida y la muerte en nuestros puestos de trabajo…
Saludos
Gracias Maite por volver a pasar y comentar por nuestraenfermeria.es
Bueno, pues como comentas es un tema muy muy divergente però porque hay intereses muy concretos en todas las áreas o ámbitos profesionales.
Y no vamos a ser menos en el mundo del final de la vida (end of live) , donde en Europa a parte de preguntarse quien se reparte el pastel de ampliar los cuidados pertinentes, el 25 poblacion de personas serà mayor de 65 aaños, a los ancianos hay un baile de quienes son los profesionales que lideran
Y en el mundo donde los mèdicos i otros profesionales ( psicólogos) estan queriendo liderar por quien de los dos estan mas capacitados para llegar tratar a las personas que entran en proceso de final de vida , aportando estadisticas de de las mejoras en ambas disciplinas y dejando de lado a todas las demas que tienen que decir algo con el cuidado de la personas, las cosas siguen sin avanzar.
YY donde estan las enfermeras??? Anteriormente con los partos o el nacer se relegaron a las llevadoras . Ahora ya han vuelto a retomar su lugar por el agotamiento civil de la medicalizacion a ultranza del nacimiento. Ahora siglo de cambios el proceso final de vida es el siguiente. La poblacion empieza a cansarse de la medicalizacion del proceso del morir.
Asi que,enfermeras/os, ¿creo que tenemos algo que decir no?
Unas de principales etapas donde la enfermera tiene mas importancia y relevancia es en el proceso final de vida. Es el momento donde la persona necesita màs CUIDADOS debido que no hay curación, donde la profesional que esta 24 horas con la persona y familiares, donde la enfermera esta capacitada 100% para gestionar cuidados , pues es su profesión. Y como gestora de cuidados puede valorar si hace falta la ayuda de otros profesionales,(trabajador social, fisioterapeuta, clerigo, terapeutas, acompañantes voluntarios, cantante, notario, abogado,….otros ).
Pero esta buena pràxis sólo se pueden llevar acabo en la pieza del puzzle que falta en este pais.y que se nos ha ocultado y negado. Los verdaderos » hospices» . Espacios para ser cuidados integralmente en el proceso final de vida.
Por mi pueden seguir las lucubraciones, las disyuntivas, los egos …pero al final la realidad es la que es. Y no podemos girar la cara hacia otro lado. Las enfermeras tenemos mucho y mucho trabajo que hacer por aquellos a los que hemos decidido cuidar. Pongàmonos los guantes y a trabajar.
Gracias Por aportar tu punto de vista Maria.
ES cierto que existe la figura del Hospice, pero realmente existe una red de cuidados y cuidadores, que bien se podría ampliar y mejorar, tocan la excelencia en muchos momentos. En estos equipos las enfermeras toman un papel fundamental, algo que no siempre es conocido. Coincido en que hay mucho, pero que mucho por hacer.
Hola ferenfer
Si, cierto, que lo que hay tiene una excelencia de cuidados. Pero esa filosofia de diosito diosito que me quede como estoy, es la que hasta ahora se ha tenido, ya no podemos mantenerla. Primero porque la excelencia la estan liquidando. , Segundo porque no todo el mundo tienen acceso a unos cuidados al final de vida respetando a la persona ,el como y donde desea fallecer, y porque despues de un amplio estudio hay piezas que faltan en este puzle.
Y en este pais, dentro de estas instituciones que tu hablas de excelencia, todo el peso cae sobre los profesionales que dia a dia trabajan, donde no son cuidados como merecen por sus instituciones, y menos en un tema tan peculiar como el final de vida. El duelo de los profesionales como comentaba la compañera, en institucuiones creadas para salvar vidas. Y los PADES estan abarrotados de funciones y saturados de nuevas competencias burocraticas que les roba tiempo para hacer su verdadero trabajo, el cual hacen estupendamente.
Y las personas que no acceden a estos servicios hospitalarios porque no los necesitan y donde los sociosanitarios que nada màs se trabaja enl àmbito de la enfermedad en el final de vida? Aunque lo diga el cartelito de la puerta. Y esos profesionales que salen llorando de sus trabajos porque no pueden hacer aquello que creen que deberian hacer…
Y en este país a parte se ha obviado la Figura Hospice ( no digo que tenga que ser lo mismo para eso tenemos la creatividad) como espacio destinado al momento de acompanyar al final de vida y donde el liderazgo total recae en las enfermeras. En donde hay una fantasmal nube incrustada en nuestras cabezas que hace que cada vez que se habla del tema resuenen rayos y truenos de algunos profesionales como si fuera tema tabu y en defensa de lo que ya hay..
Vamos a quitarnos ya la nube y ver la falta de recursos y maltrato de los que ya hay que insisto los defendere a ultranza por su excelencia ( de los profesionales ) .
Maria K